De hecho, la pandemia del covid-19 está provocando cambios muy profundos en la estructura de nuestra sociedad en tan solo unos meses. De lo que más se habla últimamente es de la “nueva normalidad”, que puede significar diferentes realidades para distintas personas o empresas.
Ya hemos hablado aquí de cuál será el nuevo estándar para hospitales y hoteles, ambos más enfocados a la conectividad y la seguridad integrada (posible también gracias a la conectividad). A pesar de tratarse de las mismas preocupaciones, los dos ítems se traducen de diferentes formas para cada tipo de negocio. En esta publicación nos centraremos en cómo se traducirá la nueva normalidad para los propietarios de edificios corporativos. Cómo les está afectando Covid y qué se necesitará para seguir siendo relevantes y rentables.
El vaciado de oficinas
El mercado de la construcción corporativa ya se estaba recuperando de la crisis de 2014, pero lamentablemente esto dio paso a otra crisis provocada por el nuevo virus.
Según la consultora inmobiliaria Newmark Knight Frank, se espera que la consecuencia de la actual crisis en el sector se traduzca en un importante vaciado en edificios, y esto se deberá a algunos factores, entre ellos la expectativa de una ola de despidos en empresas en los últimos meses, lo que, en consecuencia, disminuirá la necesidad de empleo en las oficinas.
La vacante será aún mayor en oficinas de pequeñas y medianas empresas, que no tendrán el aliento para soportar un escenario de cuarentena prolongado. Las grandes empresas, en cambio, renegociarán sus contratos por otro motivo: la oficina en casa.
Vaciar oficinas y llenar casas
La oficina en casa ya se ha convertido en una realidad en todo el mundo, por la necesidad por la pandemia, pero sigue siendo una realidad. Empresas de todos los sectores y tamaños se vieron obligadas a poner sus equipos, parcial o totalmente, para operar de forma remota (como es el caso de la persona que escribe esta publicación en pijamas -ahora hace frío en São Paulo- desde su oficina forzadamente creada en casa).
Por mucho que vayamos descubriendo los beneficios de este tipo de trabajo, muchas empresas seguirán necesitando un lugar para operar. Y, a primera vista, un menor número de puestos de trabajo puede incluso significar la necesidad de espacios de trabajo más pequeños, pero los nuevos protocolos de salud pueden revertir este problema a la necesidad de más espacio, ya que ya no será posible que las personas trabajen tan cerca unas de otras.
Estrictos protocolos de seguridad y aparición del nuevo modelo de edificios
Independientemente de cualquier cosa, el futuro de los edificios comerciales está intrínsecamente relacionado con la sensación de seguridad que transmitirán a sus clientes. Esto, por supuesto, solo se logrará si se siguen estrictos protocolos sanitarios y una comunicación clara, abierta y eficiente. El Empire State Building, uno de los mayores símbolos corporativos de Estados Unidos, ya está trabajando en cuál será el nuevo estándar para este segmento a partir de ahora.
Al mismo tiempo, la pandemia también redefinirá toda la estructura de los edificios, desde su construcción hasta el nivel de sostenibilidad presente en ellos. En Chicago se construyó el primer edificio comercial post-covid-19 y es muy diferente a lo que estábamos acostumbrados. Destacan algunos puntos:
- Ascensor accionado con los pies, una vez que el tacto es el principal punto de transmisión de la enfermedad.
- Escaneo térmico sin tocar en la entrada.
- Sistema de acceso touchless, preparado para BLE (Bluetooth Low Energy), con acceso vía smartphone.
- Pintura especial en las paredes de los baños que mata más del 99,9% de los diferentes tipos de microbios y virus dañinos en tan solo 2 horas.
- Sistema de iluminación y ventilación especial para mejorar la salud y el bienestar de los usuarios.
La nueva normalidad de todos es tecnológica, no hay escapatoria
Si bien hasta entonces el pensamiento predominante era el de un mayor uso del espacio corporativo, hoy esa idea ha cambiado hacia el mejor y más saludable uso del espacio.
Independientemente del que, la tecnología es la que ayudará a promover esto. Tener una estructura conectada será fundamental para que tu empresa pueda destacar en este nuevo escenario que, aunque menos concurrido, será mucho más saludable.
La pregunta sigue siendo: ¿te estás preparando?
Hoy en día existen soluciones de conectividad diseñadas teniendo en cuenta la realidad comercial y estructural de los edificios comerciales. Este es el caso del sistema DAS, que además de asegurar una cobertura total de la señal durante todo el proyecto, también está preparado para el 5G, la próxima generación que ya está llamando a la puerta.
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